¿Por qué no estoy cansado a pesar de no haber dormido?
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Si no puede dormir más de cuatro o cinco horas por noche (o menos), es posible que padezca privación del sueño. Además, las interrupciones regulares del sueño debidas a cosas como terrores nocturnos o “arranques de sueño” también pueden conducir a la privación del sueño.
Por ejemplo, si necesita menos de seis horas de sueño cada noche y no presenta síntomas de privación del sueño, es probable que no padezca insomnio. En su lugar, es posible que padezca una afección conocida como síndrome de sueño corto (SSS).
Con el tiempo, la privación crónica de sueño puede debilitar la respuesta inmunitaria y provocar infecciones, así como afectar a la producción de insulina, lo que aumenta el riesgo de diabetes de tipo 2. Además, la privación de sueño puede elevar la tensión arterial y aumentar el riesgo de cardiopatías.
Cansado pero no puede dormir
La gente suele reducir sus horas de sueño por motivos de trabajo, por exigencias familiares o incluso para ver un buen programa en la televisión. Pero si no dormir lo suficiente forma parte de su rutina habitual, puede correr un mayor riesgo de padecer obesidad, diabetes de tipo 2, hipertensión, cardiopatías y accidentes cerebrovasculares, mala salud mental e incluso una muerte prematura.
Incluso una noche de sueño escaso puede afectarle al día siguiente. No sólo es más probable que tenga sueño, sino también que esté de mal humor, sea menos productivo en el trabajo y se vea implicado en un accidente de tráfico.
Dormir lo suficiente es importante, pero una buena calidad del sueño también es esencial. Los signos de una mala calidad del sueño incluyen sentirse somnoliento o cansado incluso después de haber dormido lo suficiente, despertarse repetidamente durante la noche y tener síntomas de un trastorno del sueño (como ronquidos o jadeos). Unos mejores hábitos de sueño pueden mejorar la calidad del mismo. Si tiene síntomas de un trastorno del sueño, como roncar o estar muy somnoliento durante el día después de haber dormido toda la noche, asegúrese de decírselo a su médico.
Psicosis por falta de sueño
El insomnio persistente puede tener un impacto significativo en su calidad de vida. Puede limitar lo que es capaz de hacer durante el día, afectar a su estado de ánimo y provocar problemas de relación con amigos, familiares y compañeros.
Por término medio, se considera que una cantidad “normal” de sueño para un adulto es de unas siete a nueve horas por noche. Los niños y los bebés pueden dormir mucho más, mientras que los adultos mayores duermen menos.
Pida cita con su médico de cabecera si tiene dificultades para conciliar el sueño o permanecer dormido y esto afecta a su vida diaria, sobre todo si el problema persiste desde hace un mes o más y las medidas anteriores no le han ayudado.
Se trata de un tipo de terapia verbal que pretende ayudarle a evitar los pensamientos y comportamientos que afectan a su sueño. Suele ser el primer tratamiento recomendado y puede ayudar a mejorar el sueño a largo plazo.
El consumo de alcohol antes de acostarse y de determinadas drogas recreativas puede afectar al sueño, al igual que los estimulantes como la nicotina (presente en los cigarrillos) y la cafeína (presente en el té, el café y las bebidas energéticas). Conviene evitarlos por la noche.
Síntomas de la falta de sueño
Nuestro cerebro depende de un sueño adecuado. No sólo porque nos ayuda a rendir mejor en el trabajo, sino también por la vía glinfática, que elimina las toxinas y subproductos que se han acumulado durante el día. Esta vía sólo se abre mientras dormimos.
Aunque no es una afección médica, la niebla cerebral sigue siendo bastante desagradable. Los síntomas más comunes son la incapacidad para concentrarse o expresar los pensamientos con palabras, la sensación de desorientación, el deterioro de la toma de decisiones y la dificultad para recordar cosas.
Si sigues despierto durante 12 horas más, tu rendimiento general bajará considerablemente. Puedes verte incapaz de generar ideas o de seguir las instrucciones que te den, e incluso las tareas más sencillas requerirán una eternidad de tiempo para procesarlas. Tu tiempo de reacción también se ralentizará, y aquí es donde la privación de sueño puede volverse peligrosa, por ejemplo, si decides conducir solo hasta casa. Según diversos estudios, hasta el 20% de los accidentes de coche en EE.UU. se producen por conducir con sueño.